martes, 26 de agosto de 2008

Desde Rusia sin amor

Mis querid@s tod@s.

Una de las experiencias más frustrantes que he vivido últimamente ha sido la de conocer a algún chico que realmente me gustaba físicamente y que luego ha resultado ser un petardo de mucho cuidado.

Esto me ha ocurrido ya 4 veces, la última ayer mismo, y os quiero relatar lo que me ha sucedido con 3 de ellos, el cuarto lo dejo para un post independiente porque ese tiene tela marinera y necesita ser analizado en profundidad.

El primer chasco que me llevé fue en la playa nudista: estaba yo solo, como siempre, y vi aparecer del agua a un auténtico Adonis; un tío de casi 2 metros moreno, de pelo largo y rizado con un cuerpo escultural, de anchas espaldas y pectorales marcados y endurecidos en el gimnasio, con un rostro angelical típico de los chicos de los países del este de Europa. Me sorprendió, sin embargo, que se bañara con las gafas de sol puestas, pero vaya, no hice mucho caso.

Naturalmente, no pude resistir la tentación y le susurré al pasar junto a mi: guapo ! joder, qué guapo eres, coño ! Eso le dije. Por supuesto, él no entendió ni jota y me dijo, en inglés, que no hablaba español. Pero al menos me había hecho caso !! Aproveché entonces para charlar con él, preguntarle de dónde era, cómo se llamaba, lo típico. El chico era ruso y estaba en Sitges de vacaciones por unos días; resultó que su ex también estaba por allí liado con dos tíos a la vez delante de sus narices. En fin, el caso es que nos fuimos a tomar algo a Aiguadolç i nos vimos al día siguiente también pero no pasó nada de nada y poca información más le pude extraer porque era un tío SOSISIMO que casi no hablaba y había que sacarle las palabras con sacacorchos. Total, un aburrimiento.

El segundo chasco que me llevé duró 45 minutos. Conocí a un brasileño que estaba trabajando en su casa cuando decidimos quedar. Me dijo que trabajaba en el mundo de la moda haciendo diseños y tal y también como modelo; incluso tenía su página WEB y todo ! Me pareció interesante pero cuando quedamos iba vestido de estar por casa, sucio, con una barba sin cuidar y no tan guapo como aparecía en las fotos.

El caso es que fuimos a tomar algo y tuve que extraerle información con un desatascador del wc porque tampoco tenía conversación! Joder ! con lo que yo casco y el tío aquel allí mirando a la gente por la ventana y pasando de mi. Lo único que pude saber es que estaba de ilegal en Barcelona, sin papeles y que no salía nunca de fiesta por si había alguna redada y lo pillaban en bragas. A los 45 minutos le dije que si tenía que seguir trabajando en su casa que mejor nos fuéramos ya y, por suerte, no he vuelto a saber de él.

El último caso me sucedió ayer mismo. En el chat contacté con un chico de muy buen rollo que me mandó su foto y me dijo de vernos esa misma noche. Realmente es un chico muy atractivo, pequeño, delgado, poca cosa pero majete. Es peluquero y la verdad es que con este no tuve problemas para saber cosas de él, todo lo contrario ! No callaba, el tío, casi no me dejaba hablar a mi ! Imagináos, los peluqueros y peluqueras que se pasan el día cascando con las clientas y se enteran de la vida de todas ellas. Unos por poco y otros por mucho. Lo que pasa con este chico es que es demasiado vulgar para mi: amanerado y usando un vocabulario muy típico de los que no han leído un libro en su vida (palabras como "asín", "cardo" en vez de caldo, usando el imperativo en vez del pasado "ayer cenemos con mis amigas"). Buf !

Algunos pensaréis que soy un exigente extremado pero es que no me veo con alguien a quien tengo que obligarle a charlar o a callarse mientras está conmigo. Imagináos que echáis un polvo con alguien que os gusta mucho físicamente pero después o bien no puedes comentar la jugada porque el tío es un soso que no hay manera de que te cuente cosas o bien tienes que meterle los calzoncillos en la boca para que se calle y no diga más ordinarieces. Todo en su justa medida, no creéis ?

Salut i força al canut.

6 comentarios:

Unknown dijo...

Jajaaaa, esas cosas suelen pasar; la justicia cósmica funciona bastante bien, si dota a uno de inteligencia, no lo dota de belleza y viceversa. Todo a la vez sería injusto para muchos, jajaaa... Y si la belleza externa se marchita, aún resulta más efímera si no va acompasada con un saber estar, una educación... Tengamos compasión de aquellos que sufren en silencio su belleza exterior porque si no está bien asentada, les sirve de poco; alegrémonos por aquellos que hacen crecer día a día el principio de todas las cosas en esta vida:el conocimiento.
No te castigues por ser exigente, sé exigente, crece y ayuda a otros a crecer también. Así lo Bueno, el Bien, la Belleza, siempre estarán contigo.

Unknown dijo...

¡pues sí que conoces gente! Vas a toda marcha. Piensa que todo el mundo merece no una, sino varias oportunidades.

Divi dijo...

Oh my good!!! Yo tampòc soportaria sortir amb un noi d'aquestes característiques!!! ostres però que dic si ja he sortit amb un semblan, lúltim jeje ... home no parlava malament més aviat cridaba però utilitzaba mol lenguatge de carrer tirant a barriobajero.... uf a vegades penso que; qué cega estava, mare meva!!!
Meu estimat nen i no neng, jeje t'entenc perfectament, però no vam quedar que hauries de canviar de sort??? Uuuum hem de fer alguna cosa ja per a canviar la teva sort!!!
T'envio un petonás plenes d'energia de la bona bona.
Muack

el nen del pijama a rayas dijo...

hoy por fin he tenido tiempo de visitar el blog.felicidades! me parece una idea estupenda.
ya te dijimos MM y yo que la foto no era la mejor...me he reido mucho con el comentario de la primera entrada al respecto!!! solo una critica...estoy de acuerdo con Rocio,hay que dar mas oportunidades a la gente o el lugar para exponer vivencias y reflexiones que pretende ser el blog se puede convertir en sala de despieze de aquel que pase por tu vida sin cumplir las expectativas.en algun caso puede ser divertido incluso, pero injusto a mi entender.animo!

David dijo...

Pobre Calimero

Silvia dijo...

Belleza, cerebro y saber estar no tienen porqué estar reñidos. Parece difícil encontrar un Adonis, que sea inteligente, con buena conversación y que tenga buenas maneras, pero no es imposible. Más difícil es que no sea un cabrón o que todavía no esté pillado.