viernes, 21 de noviembre de 2008

Carne, pescado y huevos doloridos

Mis querid@s tod@s.

Siempre hay una primera vez para todo. Y, según dice mi querido amigo J., la primera vez siempre duele. Aunque creo que duele más si no sabes lo que te va a pasar por primera vez que si ya sabes dónde te vas a meter.


Y esto es lo que me pasó a mi hace ahora una semana. En uno de estos antros que visito recientemente conocí a un chico que me encandiló: joven, guapo, delgado. Se dejó hacer y yo noté algo en su porte, o quizás fue su aroma, no sé, que me hizo preguntarle:


- Ya sabe tu novia que estás aquí ?

Supongo que se quedó sorprendido por la pregunta y me respondió vagamente:

- Es más complicado que eso.


Así que acerté: el niño era hétero. Por primera vez en mi vida me he liado con un hétero que, encima, tiene novia. Hay que joderse. La verdad es que el sueño de muchos gays es liarse con uno de esos tíos con pinta de garrulillo: esos que se pasan el día endureciendo el culo en el gimnasio y tienen ese aspecto tan masculino, tan machote, con esas caras de ángel, esos cerebros tan estrechos y esos cuerpos finos y fibrados.


Y voy yo, sin comerlo ni beberlo, y me lío con uno. Evidentemente no existe ninguna esperanza de "llegar a conocernos", ni quiero. Me estuvo explicando que su novia, lógicamente, no sabe que el niño quiere "experimentar", como él me dijo; también me contó que sus padres y su hermano saben que al niño le va tanto la carne como el pescado, y yo me imagino una de esas comidas familiares en las que se reunen hijos y futuras nueras echándose miraditas cómplices los unos a los otros y sin atreverse ni siquiera a pensar en que su niño "experimenta" con tíos fuera del noviazgo oficial, no vaya a ser que la novia nos lea el pensamiento y la caguemos.


La verdad es que fue bastante delicioso compartir un buen rato con el tal A. Pero el que más disfrutó fue él, el muy cabrón, porque yo, ante un cuerpecito y una cara tan bonitos como los que él tenía, me distraje larga y dulcemente en acariciar, besar, tocar, pellizcar y todas esas cosas ricas que suelo hacer a mis amantes. Luego, cuando le pedí algo a cambio, me mandó a pastar fango porque el niño es más hétero que gay, y esto de hacerle cosas a otro tío no le acaba de convencer. Por eso fue doloroso, sobretodo después de todos los achuchones que le dí y la poca respuesta que obtuve: los huevos era lo que me dolían !!!

En fin, nada peor para la salud que ponerse a 1000 y no acabar satisfecho. Llevo días pensando: nunca más, nunca más con un hétero !!! Pero ya sabéis lo que dice el refrán:

Nunca digas de este agua no beberé,
ni este cura no es mi padre,
ni esta polla no me cabe,
ni este culo no se abre.


Salut i feina
i un bon forat
on guardar l'eina.

2 comentarios:

Divi dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Divi dijo...

Jajajaaaaaaaaaaa, que bueno!!!
Bé al menys has tastao un hetero,jeje ...
I jo, si que nunca diré:
De este agua no beberé,
ni esta polla no me cabe,jajaja
Ja t'explicaré les meves sensacions en quant faci reliatat meu somni més ocult, ja saps;)amb una nena molt però que molt bona jajaja!!
Això que no et tornin les carìcies es una merda, perquè no hi ha res millor que rebre-les amb la mateixa intensitat com les dones .
Petonás